
La joven revelación de la música boliviana, Geronimo Sims presenta su nueva canción, Corazón de papel. Sincera y melancólica, esta balada muestra un nuevo costado del artista, que se basó en su experiencia personal para darle vida a una letra en la que muchos se verán reflejados.
Esta es la primera colaboración de Gero, que se unió a la argentina Ernes, con quien combina a la perfección la dulzura de sus voces y armonías.
Corazón de papel, compuesta por Geronimo y su socio musical Leandro Castro, cuenta una historia de amor y separación, tan íntima como real. Ernes se sumó a la canción no solo con su voz, sino también con versos que fascinaron a Gero desde un primer momento. Corazón de papel es una canción donde podemos escuchar a un Geronimo enamorado, desnudando un lado de su corazón que no conocíamos.
Sobre la creación de la canción Gero cuenta: “Corazón de Papel nace de una relación muy bonita, la canción lleva cierta melancolía y esto es porque estaba atravesando un cambio muy importante en mi vida, me venía a Argentina, y esto iba acompañado de muchas despedidas, entre ellas mi “corazón de papel”, por quien aún siento mucho amor, pero nos tocaba decir adiós, y como yo no soy muy bueno para hablar, preferí cantarle todo lo que quería decirle.”
Sobre su colaboración, Ernes, dice: “Corazón de papel fue una gran nueva experiencia. Aprender sobre la historia de Gero y acompañarlo a contar esta historia fue un placer. Yo pude conectar porque he experimentado amor a la distancia pero desde lo emocional.”
El videoclip dirigido por Diego Pino y Lucas Emiliani, narra un amor a distancia, con Gero en Tarija y Ernes en Buenos Aires.
Sobre el rodaje del videoclip Gero recuerda: “Fue hermoso, y muy especial, porque fue mi primer video grabado en mi país Bolivia, lo grabamos en mi lugar favorito del mundo, el Rincón de la Victoria en Tarija, un bosque que parece sacado de un cuento, además de ser una fuente de agua para la región, es un lugar en donde crecí y pasé hermosos momentos a lo largo de mi vida. Nos dividimos en dos equipos: uno en Bolivia conmigo, y otro en Argentina con Ernes, centralizamos todo mediante la producción, y logramos un resultado increíble, siento que pudimos darle vida a la historia que queríamos contar.”